Terapia Pareja
Las relaciones de pareja pueden suponer tanto una necesidad como una fuente de satisfacción. En la mayoría de ocasiones, las personas tienen unas expectativas de bienestar y estabilidad asociadas a la relación de pareja. Sin embargo, cuando tales expectativas no se cumplen se pueden generar verdaderos conflictos tanto individuales, es decir, aquello que tiene que ver consigo mismo, como con la otra persona. La insatisfacción con la pareja puede ser compartida, en la cual ambos mantienen la idea de que no están bien, o bien, puede ser experimentado por solo un miembro. Los problemas de pareja pueden acabar afectando a otras áreas de la vida de la persona como, por ejemplo, la vida laboral, las relaciones sociales, el autocuidado o las relaciones familiares. Algunos de los problemas habituales que se trabajan en terapia de pareja son: problemas de comunicación, diferencias entre las expectativas que los dos miembros tienen sobre la relación, dificultad para manejar las relaciones familiares, celos, desconfianza e infidelidad o problemas de dependencia, entre otros.